Alrededor de 670.000 exámenes de gramática tuvieron que analizar los investigadores para determinar la edad más efectiva para aprender otro idioma.
Siempre hemos tenido la creencia de que el mejor momento para aprender un nuevo idioma es durante la niñez. Se suele decir a menudo que si no se nace en un país extranjero, se tienen padres con una segunda lengua o no se inicia a aprender desde antes de los 10 años, los esfuerzos necesarios para lograr aprender crecen en gran medida.
Precisamente esto era lo que quería comprobar el catedrático de psicología Joshua Hartshorne. Este hombre dirigió un estudio como parte de su tesis de posdoctorado en el Massachussets Institute of Technology (MIT). Junto a un equipo de expertos en ciencias cognitivas decidieron analizar el rango de edad más efectivo para aprender un nuevo idioma.
Para esto decidieron pensar en grandes proporciones y analizar a la mayor cantidad de gente posible. Necesitaban a cientos de miles de personas de todas las edades y etapas del aprendizaje de un idioma. Se decidió entonces que se creara un cuestionario de gramática que fuera entretenido para que la gente lo quisiera completar. No solo eso, sino que lo recomendaran a otros y se hiciera viral.
Se publicó un cuestionario en Facebook llamado «Which English?» cuya duración no era de más de 10 minutos. El éxito que tuvo fue arrollador, pues 669.498 personas terminaron realizándolo. Se les preguntó por cuánto tiempo habían aprendido inglés y desde qué edad. Además, también era importante saber en qué espacio habían aprendido el inglés, si visitando otro país o en un aula de clase.
Los resultados
Increíblemente los análisis arrojaron unos resultados más agradables de lo que se esperaba. Determinaron que la habilidad para aprender gramática permanecía «fuerte» hasta una edad de 17 o 18 años. Desde ese punto la eficacia del aprendizaje empezaba a decaer. Incluso Heartshorne manifestó su sorpresa: «El debate ha sido si el aprendizaje declina desde el nacimiento, comienza a disminuir a los 5 años o comienza a disminuir a partir de la pubertad».
También se dieron cuenta que los adultos sí son buenos para el aprendizaje. La única falla es que no llegarán a tener el nivel de un hablante nativo tan fácil si no han estudiado desde su niñez.
De la misma forma no vieron diferencias significativas entre todos aquellos que iniciaban a aprender antes de los 10 años. Es decir, daba igual si se empezaba a hablar otro idioma desde los 3 años como desde los 6.
Sin embargo, todavía es desconocida la razón por la cual desde los 18 años se deja de avanzar con tanta facilidad. Como dice el profesor de ciencias cognitivas Josh Tenenbaum, esto se podría deber a lo que se vive en esa edad:
En promedio se es menor de edad hasta los 17 o 18 años en muchas sociedades. Después de eso, sales de tu casa, tal vez trabajas a tiempo completo, o te conviertes en un estudiante universitario especializado. Todos esas situaciones pueden afectar la tasa de aprendizaje para cualquier idioma».