Para lograr las metas de una comunidad es necesario el trabajo en equipo; hay tan pocas personas acostumbradas a ello, que los efectos pueden verse reflejados en la sociedad.
“Las fortalezas están en nuestras diferencias, no en nuestras similitudes”, Stephen Covey.
Sin importar nuestra profesión, religión o pensamiento político cuando nuestro objetivo común es trabajar por la comunidad se puede trabajar de manera coordinada involucrando a personas para la ejecución de un proyecto social.
El equipo se compromete a un resultado final, el cual no depende de cada uno de sus miembros de forma independiente, sino que cada miembro es responsable de un cometido, y sólo si todos ellos cumplen su función será posible sacar el proyecto adelante. Las organizaciones que tienen un mayor nivel de desempeño, son aquellas donde se favorece el trabajo en equipo.
Al trabajar de manera conjunta en un objetivo común, éste se cumple en menor tiempo, lo cual beneficia a la productividad y se complementan las habilidades y los talentos disminuyendo las debilidades y aumentando las fortalezas, ya que cada persona aporta aquello que mejor sabe hacer.
Cuando cuentas con un equipo aumenta el sentido de pertenencia sintiéndose parte de algo importante donde la creatividad aumenta por la motivación para crear y aportar ideas .Otro factor que aumenta es el individual cuando realmente todos colaboran, cada miembro sabe para qué es bueno y en qué áreas necesita ayuda.
El trabajo en equipo se convierte entonces en un proceso de autoconocimiento, donde existe la posibilidad de desarrollar el propio potencial, detectando áreas de oportunidad con actividades definidas.
Para concluir el resultado global alcanzado por el grupo es superior a la suma de los resultados que obtendrían sus componentes trabajando individualmente. Así, la sinergia aparece cuando al interés por el resultado del equipo se suma la confianza y el apoyo mutuo de sus miembros.
Autor: Jose Romero
@nuevoenedonton – Unidos Somos Mas